Aragón emitió en 2022 un total de 12.814 kilotoneladas de CO2 a la atmósfera, lo que supone un incremento del 3,2% respecto a las emisiones de 2021, en un contexto marcado principalmente por la continuación de la recuperación económica tras la crisis originada por la pandemia del COVID-19. Esta cifra es, sin embargo, un 15% inferior a la de 1990, año de referencia desde los acuerdos del protocolo de Kioto. Además, la masa forestal de la comunidad absorbe el 21,4% de las emisiones emitidas anualmente.
El Sistema Español de Inventarios publicó el pasado mes de marzo el inventario de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) a nivel estatal, con los datos de las emisiones correspondientes al penúltimo año, es decir, a 2022. Posteriormente, en el mes de abril, facilitó a las comunidades los datos desagregados de sus respectivos territorios, incluyendo la revisión de toda la serie histórica (1990 en adelante).
El 25% de las emisiones de GEI en Aragón provienen del sector regulado, es decir, de aquellas instalaciones afectadas por la Ley 1/2005, de 9 de marzo, por la que se regula el régimen de comercio de derechos de emisión (RCDE) de GEI, y que generan emisiones que pueden estar asociadas a la generación de energía o a determinados procesos productivos.
Por su parte, el 75% de las emisiones de GEI en Aragón proceden del denominado sector difuso, es decir, aquellas actividades no reguladas por la Ley 1/2005, de 9 de marzo. El sector difuso incluye, entre otros, el transporte, la agricultura y ganadería, las emisiones en los sectores residencial, comercial e institucional (RCI), además de toda la industria no afectada por la Ley 1/2005, de 9 de marzo.
En Aragón las principales fuentes de emisión son el transporte, la ganadería y la industria. El 24,2% de las emisiones proceden de la ganadería, especialmente por fermentación entérica y gestión de estiércoles. El transporte supone el 23,8% de las emisiones, mientras que las actividades industriales son responsables del 16,4% de las mismas.
Por otro lado, en Aragón, el sector denominado “uso de la tierra, cambios en el uso de la tierra y silvicultura” actúa como un potente sumidero que mitiga de manera considerable las emisiones de CO2. En este sentido, y gracias principalmente a la masa forestal, se absorbe el 21,4% de las emisiones de CO2 emitidas anualmente. Así, el balance neto de las emisiones en Aragón en 2022 fue de 10.068 kilotoneladas de CO2e.
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