Alcorisa ha dado un paso importante hacia la sostenibilidad energética con la constitución de su primera Comunidad Energética Ciudadana. Este innovador proyecto, que se desarrollará bajo el modelo de cooperativa, permitirá a los vecinos de la localidad generar y consumir energía renovable, mayoritariamente solar fotovoltaica, de manera comunitaria.
En la asamblea constitutiva celebrada el pasado jueves en el centro cultural Valero Lecha, los asistentes fueron informados sobre los detalles del proyecto, sus beneficios y las oportunidades de ahorro en las facturas eléctricas.
Actualmente, ya son 32 las personas que han mostrado su interés por esta iniciativa y se espera que la cifra aumente a medida que la comunidad energética avance. Gerardo Villarroya, concejal de Alcorisa y el secretario de la sociedad que conforma este proyecto, se muestra positivo ante la acogida. “Cuando la gente vea que esto funciona seguro que más vecinos se apuntarán. A medida que haya más socios, también podremos hacer nuevas implantaciones”, explicó.
Este proyecto nace con la intención de ofrecer una alternativa a las grandes compañías eléctricas y dar a los vecinos la oportunidad de consumir energía limpia, generada localmente y a precios más bajos, además lo hará fijándose en otros modelos existosos como es el caso de Luco del Jiloca. Villarroya, además, comentó la importancia de reducir los costes. “Este proyecto comunitario consiste en que todos los interesados puedan apuntarse y adquirir los kilovatios que necesitan ajustados a su consumo. Los beneficios de hacer la instalación de forma conjunta incluyen la reducción de costos al comprar más placas solares”, dijo.
Beneficios para todos
El proyecto está diseñado para ser flexible y adaptarse a las necesidades cambiantes de cada familia y también de los comercios locales. Los vecinos pueden elegir de manera inicial una cantidad de kilovatios acorde a la situación actual, pero tienen opción de aumentar su participación si las necesidades energéticas crecen en el futuro. Además, uno de los principales activos del proyecto es que permite la participación de comercios y viviendas que no disponen de espacio propio para instalar paneles solares, de forma en que el sistema fotovoltaico comunitario también ayuda a democratizar el acceso a la energía renovable en espacios urbanos compartidos.
La comunidad energética de Alcorisa ha abierto el proceso de inscripción hasta el 20 de octubre , para que todos los interesados puedan beneficiarse de las subvenciones del programa Next Generation EU y del Gobierno de Aragón, los cuales ayudarán a reducir los costos de la instalación inicial. “Estamos en un buen momento para lanzar esto, porque las ayudas pueden beneficiar enormemente a los socios que se apunten ahora”, añadió Villarroya.
La idea inicial es que este proyecto no se limite a Alcorisa, sino que también pueda extenderse a otras localidades cercanas. “Alcorisa es el punto de partida, pero el objetivo final es crecer hacia otros pueblos de la comarca y conformar una comercializadora de electricidad local, que además de generar energía, cree puestos de trabajo en la zona”, apuntó Villarroya.
Un proyecto complementario
El secretario también aclaró que el proyecto de la comunidad energética no es incompatible con otras iniciativas locales, como el plan de compensación de Endesa, que incluye la instalación de un sistema fotovoltaico para el ayuntamiento. Según Villarroya “ambos proyectos son complementarios y beneficiosos para el pueblo. La instalación de Endesa cubrirá parte del consumo, pero con la comunidad energética los socios podrán elegir la cantidad de kilovatios que necesitan”, aseguró.
Con este proyecto Alcorisa se suma a una creciente lista de municipios que apuestan por la energía comunitaria, buscando no solo abaratar los costos de la energía, sino también crear un modelo más justo y sostenible.