El discurso museológico se centrará en los trenes de viajeros, incluyendo vagones de la línea del Orient Express.
El futuro Museo del Ferrocarril de Aragón tendrá tres sedes, en Canfranc, Zaragoza y Caminreal-Fuentes Claras, y exhibirá 99 vehículos históricos, muchos de los cuáles todavía se han de rehabilitar.
Así lo han expuesto el consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda del Gobierno de Aragón, José Luis Soro, el director gerente de la Fundación de Ferrocarriles Españoles, José Carlos Domínguez, y el presidente de la Asociación Zaragozana de Amigos del Ferrocarril y Tranvías (AZAFT), Carlos Abadías.
Los tres han firmado una adenda a un convenio suscrito el pasado mes de octubre por el Gobierno de Aragón y la fundación por el que ésta cedió el uso y depósito temporal de 59 vehículos históricos –locomotoras, coches y vagones– para que formaran parte del Museo del Ferrocarril de Aragón.
Además, el Ejecutivo ha firmado sendos convenios con cada una de estas organizaciones para contar con su asesoramiento y apoyo en la creación del futuro museo, de cuyos órganos de gestión, previsiblemente, también formarán parte.
Soro ha precisado que el objetivo es contar con su experiencia y conocimientos técnicos para definir la fórmula de organización y el discurso museológico de cada una de las tres sedes, que será “común” en todas ellas. En el caso de la AZAFT, también asesorará sobre restauración de vehículos y aporta otros 40 al futuro museo entre vagones, coches y locomotoras, además de sus enseres y archivos.
El consejero ha esgrimido que para tener éxito en un proyecto, “lo mejor es rodearte de los mejores”, como son estas dos entidades, de las que ha subrayado su “pasión” por este patrimonio ferroviario.
PRESERVACIÓN
Asimismo, esta asociación va a ser la encargada de conservar los 99 vehículos, muchos de los cuales están declarados como Bienes Catalogados del Patrimonio Cultural Aragonés hasta la puesta en marcha del museo. Esta colaboración incluye futuras rehabilitaciones de coches ferroviarios para lo que “necesitaremos buscar fondos” con el propósito de que puedan ser expuestos, cuando estén las sedes, ha dicho Soro.
Precisamente, la firma de estos documentos se ha llevado a cabo en un coche ministerial datado en 1955, con salón, cocina, baño y estancias, que ha sido restaurado gracias a la AZAFT.
Se conoce como Tren Azul y también incluye un coche restaurante de 1926, que realizaba el trayecto entre París y Lisboa; tres coches postal –dos estafeta postal y un furgón–; un coche restaurante reformado en los años 60; y un coche de cama de los años 70. En total, son siete coches históricos, más la máquina. El tren ha realizado este martes el recorrido entre Delicias y la estación de Miraflores.
El presidente de la Asociación Zaragozana de Amigos del Ferrocarril y Tranvías, Carlos Abadías, ha asegurado que este día “es un sueño hecho realidad”, después de 35 años trabajando por este museo y “recuperando y uniendo estas 99 piezas, que van a ser las estrellas del discurso museológico”.
Ha mencionado a los “pioneros” que en los años 80 del siglo pasado “recorrieron todo el país para buscar esos vehículos que estaban en desuso y poderlos guardar”. En el caso del Tren Azul, ha dicho que con sus siete coches ya restaurados se puede desplazar a cualquier localidad como parte del museo.
Abadías ha explicado que la colección de 99 vehículos que se ha conseguido reunir en Aragón nació con la idea “de recuperar los viajes en sus diferentes épocas” y por eso el futuro museo se centrará “en los coches de viajeros” y en mostrar “cómo se ha viajado en las diferentes épocas del siglo XX en España”.
Ha dicho que la mayoría de estos vehículos fueron fabricados en Zaragoza, “en la antigua fábrica de Carde y Escoriaza”, que dio “nombre internacional” a la ciudad. La colección se completa con vehículos de la Compañía Internacional de Coches Camas, que fue la que impulsó la línea del Orient Express, “que forma parte de esta colección”, piezas de las que hay “muy pocas en el mundo, muy seguidas por los aficionados” y que reflejan “la belleza de los años 20”.
Por su parte, el director gerente de la Fundación de Ferrocarriles Españoles, José Carlos Domínguez, ha asegurado que el material reunido en Aragón “es espectacular” y ha considerado “digno de reconocimiento” el trabajo realizado por AZAFT en su recuperación.
El consejero Soro ha manifestado que el ferrocarril “es pasado, presente y futuro”. Respecto al pasado, ha remarcado la vocación de “preservar” y “difundir nuestro legado, que forma parte de nuestra identidad colectiva”, una tarea en la que ha agradecido el trabajo “durante décadas” de la asociación AZAFT y en el que ahora se da “un paso más” con el objetivo de “hacer accesible” este patrimonio a la ciudadanía a través del futuro museo.
Asimismo, ha sostenido que el ferrocarril también “es futuro” y elemento “clave” para garantizar “el derecho a la movilidad, y más en un territorio tan extenso como Aragón”, así como “para desarrollar todo nuestro potencial logístico, vertebrar el territorio y garantizar la cohesión social”.
A su entender, “el ferrocarril no es una opción, es una obligación desde el punto de vista medioambiental” porque “es imprescindible para descarbonizar la economía y luchar contra el cambio climático”.
Fuente: Diario de Teruel