El Plan de Reforestación de Aragón (PREA) ha echado a andar en Longás (Zaragoza) y en Aliaga (Teruel). El objetivo de esta línea estratégica, desarrollada por la Dirección General de Gestión Forestal del Departamento de Medio Ambiente y Turismo, es mitigar el cambio climático, restaurar el medio forestal y proteger el suelo de la erosión mediante la plantación de al menos dos millones de árboles sobre unas 2.000 hectáreas en cuatro años. En estos momentos se están licitando otros ocho proyectos que sumarán más de 900 hectáreas de superficie.
En el plan se prevé la reforestación con diversas especies, entre las que destacan los pinos autóctonos por su capacidad de supervivencia en condiciones adversas de clima y suelo. También se usarán sabinas, encinas, robles y otras especies acompañantes propias de los bosques aragoneses.
Los pinos se plantarán en superficies más o menos extensas. Con las especies acompañantes se crearán núcleos de dispersión que en el futuro proporcionarán semilla para que se produzca el proceso de reposición bajo la cubierta del pinar de forma natural.
La preparación del suelo se realiza mediante ahoyado mecanizado. La tierra únicamente será removida, es decir, no se llevará a cabo extracción, de cara a una alteración mínima de las capas naturales del suelo. No se realizarán rozas previas de forma que se minimice el impacto hidrológico y paisajístico.
Para definir la localización de los terrenos, la Dirección General de Gestión Forestal ha realizado con la Universidad de Zaragoza un análisis para analizar los estados erosivos de las cuencas hidrológicas de Aragón y poder así priorizar los sitios con problemas erosivos mayores.
Además, se han revisado los instrumentos de planificación forestal vigentes en Aragón para evaluar en cuáles de ellos se han establecido mejoras referentes a la reforestación y por último se ha realizado un sondeo a los ayuntamientos aragoneses para recoger sus demandas de reforestación y actuar en los montes de utilidad pública de su propiedad, ya que son terrenos en los que la Administración Forestal puede actuar directamente.