Es una mina auténtica convertida en un verdadero museo. Mantiene vivas las historias de la minería del carbón y recopila preserva el importante patrimonio minero de la cuenca carbonífera de Mequinenza. A lo largo de la visita se descubre como han ido variando los sistemas empleados para la extracción del carbón. Los Museos de Mequinenza se enmarcan en el Aiguabarreig de Mequinenza, un espacio natural de gran trascendencia como área de reproducción, invernada y descanso de fauna migratoria. Con la unión de los ríos Ebro, Segre y Cinca, constituye la mayor confluencia fluvial de la península ibérica, una de las más grandes de Europa y una de las de mayor interés biológico y ambiental en España.
Los museos de Mequinenza forman parte desde 2017 de la Red Ibérica de Espacios Geomineros, de la asociación de espacios literarios “Espais Escrits” y desde 2020 de la Global Network of Water Museums – UNESCO IHP (Red Mundial de Museos del Agua de la UNESCO-IHP).