gobierno_aragon-logo

Escucha ofrece 18 rutas para conocer la riqueza minera, natural y paleontológica

Los recorridos propuestos por el término municipal oscilan entre los 3 y los 18 kilómetros.

La Asociación para la Conservación del Patrimonio Minero de Escucha junto con el Ayuntamiento de la localidad y el apoyo de la Comarca Cuencas Mineras (ACCPAME) ha editado un cuaderno que lleva por título Rutas: caminos y paseos Escucha-Valdeconejos. Patrimonio natural minero e industrial. Son 180 páginas que recorren 18 itinerarios con el objetivo de descubrir algunos contenidos de interés natural, minero, industrial, arqueológico, paleontológico, histórico o etnográfico, complementados con fotografía, curiosidades o notas de prensa.

ACCPAME ha coordinado la edición, tiene entre sus objetivos la difusión del patrimonio más próximo, por lo que esta publicación, además de proponer una actividad saludable, a través de paseos y andadas por Escucha y Valdeconejos, pretende descubrir algunos elementos del mismo y valorar una riqueza, en ocasiones, desconocida, oculta o silenciada.

De esta manera, con un marcado carácter didáctico, cada una de las rutas que se presentan está asociada a un tema relacionado con el patrimonio y que ha sido redactado y desarrollado por parte de algunos vecinos conocedores o expertos en los mismos. Son esenciales los capítulos dedicados al patrimonio minero e industrial como la minería en el siglo XIX, el Pozo Pilar y la empresa Mineras y Ferrocarriles de Utrillas (MFU), la mina Se Verá y el Museo Minero de Escucha, los desmontes y la restauración de escombreras, la mina Magdalena o el pozo Trinidad (la última mina), el ferrocarril Teruel-Alcañiz, la central térmica y el Valle de las Cenizas, la hospedería y los barracones para obreros o la extracción de azabache en el Barranco Malo.

Sin embargo, no solo se abordan aspectos relacionados con la minería sino que también se suman apuntes históricos como el poblado ibérico del Castillo, la presencia carlista en la Sierra de San Just, las trincheras en la guerra civil o la leyenda del tío Greñicas.

También se dedica un apartado a conocer la micología de la zona, árboles y arbustos, plantas silvestres comestibles o la parte de la fauna más reconocible de las aves con especial mención a la abubilla o burbute, apodo que distingue a los naturales de Escucha.

Entre las páginas se hace alusión al recetario más antiguo, se recoge alguna tradición importante como la romería a la ermita de San Just o se muestran los fósiles más comunes que forman parte de la riqueza paleontológica del entorno.

Noticia completa en Diario de Teruel

Comparte en tus redes sociales