Fuente: Diario de Teruel. Marcos Navarro
Una quincena de proyectos participan ya en la fase virtual transitoria del Despertador Rural Inteligente de Oliete, el programa para impulsar a emprendedores de zonas despobladas ideado por Apadrinaunolivo.org, que ha decidido “demostrar el movimiento andando” mientras terminan las obras del centro de nómadas digitales de la localidad.
Proyectos relacionados con la agroalimentación (setas de chopo, cerezas y conservas vegetales), crecimiento personal, una casa con encanto en el embalse de Cueva Foradada, un laboratorio de cosmética, un colegio americano, viajes en bicicleta o el uso turístico de un desmonte minero y de las torres de vigilancia de incendios forestales forman parte de los proyectos a incubar. Esta próxima semana se hará una selección de los más viables.
Cada emprendimiento deberá comprometerse con una agenda quincenal de trabajo para el desarrollo de su hoja de ruta y recibirá una ayuda anual para desarrollar el proyecto.
Una de las emprendedoras inscritas es Chus Blasco, de Alacón aunque residente en Zaragoza, que apuesta por volver al pueblo con una “UCI para el alma”, un proyecto de coaching personal y ejecutivo que contará con un espacio donde particulares y empresas realicen retiros. Habrá una casa rural y un glamping ubicados en pleno Parque Cultural del Río Martín.
El Despertador ha sido para ella “dar el empujoncito para hacer realidad el proyecto”. Tiene fe en los mentores que le asesorarán “para poder ir avanzando poco a poco”. Su idea es poner el proyecto en marcha en dos o tres años, con creación de empleo.
Por su parte, Antonio Gascón aspira a replicar en Aragón el “Paseo por encima de los árboles” (Treetop walk o Baumwipfelpfad, en inglés y alemán) que constituye un importante atractivo turístico en países del norte de Europa como Noruega, Dinamarca, Lituania o Eslovenia. En su caso, se trata de “aprovechar turísticamente las torres de vigilancia” contra incendios, desde donde “las vistas son inmensas”.
Este vigilante de Sarga residente en Alacón valora la “oportunidad de desarrollo rural” que supone el Despertador. Agradece especialmente el apoyo que recibe con temas burocráticos y búsqueda de financiación, pues hay fondos europeos “que financian exactamente este tipo de proyectos”. Necesita hacer compatible el uso turístico con la prevención de incendios, y también le iría bien que los caminos estén mejor arreglados para subir a los picos.
Emprendimientos sostenibles
Entre los objetivos del programa figura la generación de emprendimiento como motor principal de los pueblos. El proyecto social de recuperación de olivares yermos de Oliete pretende asentar nuevas empresas, para lo que incubará proyectos sostenibles que durante un plazo de tres a cinco años impacten directamente en el medio rural, manteniendo la población y atrayendo urbanitas.
Consolidar un tipo de emprendimiento rural que sea modelo de transición ecológica y de desarrollo rural sostenible también forma parte de sus objetivos. El proyecto pretende, además, obtener un triple balance sostenible (medioambiental, social y desarrollo rural).
El cofundador de Apadrinaunolivo.org Alberto Alfonso explicó que no van a esperar a que esté acabada la obra que el Ayuntamiento de Oliete licita en el espacio del antiguo cuartel de la Guardia Civil para este proyecto.
“El medio rural necesita proyectos tractores”, defiende Alfonso, que cree en las nuevas tecnologías para dar una nueva oportunidad a los pueblos más allá de la agricultura y la ganadería. La “nueva era” permite que, además de las profesiones de siempre, crezcan start-ups y otros perfiles digitales que hoy ya se encuentran deslocalizados.
“La posibilidad de conectarnos desde cualquier parte del mundo hace que los pueblos tengan la oportunidad de aprovechar lo mejor de cada lado y aplicar cualquier tipo de tecnología”, comenta la consultora en economía sostenible María Margarita Rodríguez.