La gestión forestal sostenible es fundamental para abordar el doble desafío que supone la transición ecológica y el reto demográfico. Esta fue una de las consideraciones más destacadas del acto institucional celebrado este sábado en la iglesia de Orihuela del Tremedal con motivo de la celebración, junto con la vecina localidad de Orea, del Día Internacional de los Bosques, que este año tiene como lema Bosques: consumo y producción sostenibles.
El evento, que se tuvo que aplazar en 2020 por motivo de la pandemia, ha servido para repasar desde el jueves y hasta este domingo la situación de los bosques y del sector forestal en España, con especial atención al estado de los Montes Universales que comparten las dos localidades anfitrionas, a caballo entre Teruel y Guadalajara, esto es, entre Aragón y Castilla La Mancha. Bosques vivos, pueblos con futuro es el lema que ha guiado a la organización.
La recepción institucional comenzó este sábado en el centro de interpretación del parque natural del Alto Tajo Sequero de Orea y un recorrido por la Feria Mundo Rural con artesanía de la zona. Después, los participantes se desplazaron hasta Orihuela donde, tras los discursos de los representantes de las instituciones organizadoras, se inauguró la escultura conmemorativa del Día Internacional de los Bosques en el collado Travino. A continuación, se hizo la demostración del apeo de un pino con hacha, que fue transportado hasta Orea por vacas serrranas de la Real Cabaña de Carreteros.
El secretario general para el Reto Demográfico del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Francesc Boya, anunció las próximas convocatorias enmarcadas en el Programa de Bioeconomía y Gestión Forestal Sostenible, dotado con 120 millones de euros de inversión con una gobernanza compartida, dado que destina 40 millones a las comunidades autónomas, 40 a las entidades locales y 40 a empresas, asociaciones y emprendedores.
Se trata del primer paquete de inversiones en el que se combina de forma específica la promoción de la bioecononía y las actuaciones de transformación territorial y lucha contra la despoblación.
Estas ayudas buscan favorecer el surgimiento de iniciativas de bioeconomía circular, aprovechamiento energético con recursos endógenos, gestión de los recursos forestales, apoyo a la fabricación de productos del bosque (madereros, micológicos, resina…) y proyectos de divulgación y capacitación, entre otros.
Noticia completa en El Diario de Teruel. Alicia Royo