Recientes estudios concluyen que en el mundo será necesario construir más de dos mil millones de nuevas viviendas durante los próximos 80 años debido al incremento de población y a los cambios de tendencia del tamaño promedio de los hogares.
Otro análisis presentado en 2021 estima que España necesita más de un millón de inmuebles de alquiler asequible para solucionar el problema de accesibilidad a la vivienda.
Según el Ministerio de Fomento, existen un total aproximado de 26 millones de viviendas en España. Unas 3,4 millones estaban vacías en el 2011, según la última estimación del INE.
Consumo energético y emisiones
Desde hace años la preocupación por el impacto ambiental del sector de la edificación viene transformándose en exigencias y medidas legislativas de fomento y apoyo a la eficiencia energética, el fomento de las energías renovables y la reducción y gestión sostenible de residuos de construcción y demolición.
A finales del siglo XX, tras décadas de desarrollo de los sistemas de climatización y acondicionamiento ambiental y de implementación de las primeras exigencias de aislamiento en los edificios en España, la principal preocupación fue la reducción de la energía operacional o en fase de uso. Esta incluye la asociada principalmente a la calefacción, refrigeración, generación de agua caliente sanitaria e iluminación.
Con la aplicación de las nuevas medidas en el contexto de la UE se han conseguido a su vez importantes avances en la reducción de emisiones de CO₂ provenientes de este consumo. Esto ha permitido poner el foco en otro de los aspectos no menos relevantes: la energía incorporada, es decir, aquella necesaria para la extracción de materias primas, fabricación y transporte de materiales y construcción.
Fuente: Climatica La Marea