La Red Española de Aprendizaje-Servicio realiza una importante aportación a la innovación educativa al ofrecer este inventario de 100 buenas prácticas de aprendizaje-servicio, y resalta la importancia de las tres razones por las que se anima a divulgarlas:
- visibilizar su valor educativo;
- reconocer la tarea de los centros educativos y entidades sociales que las impulsan;
- ofrecer inspiración para nuevos proyectos.
El aprendizaje-servicio no es una metodología educativa nueva; casi desde los orígenes de la educación formal ha habido centros y docentes que comprendieron que la educación de calidad no puede aislarse de la vida y del entorno, ya que estos son, en sí mismos, la fuente de los aprendizajes indispensables, justifican la necesidad de enseñar y aprender, y, por ello, suponen una experiencia motivadora y de compromiso social insustituible. No obstante, el ApS como movimiento y metodología sistematizada surge en Estados Unidos en los años 60 y se empieza a divulgar en España a principios de este siglo –en torno a 2004–, a partir del trabajo de grupos pioneros en Cataluña y el País Vasco, extendiéndose después a centros escolares y universidades de otras comunidades. Como consecuencia de ello, a lo largo de la última década, se han ido configurando en nuestro país redes de ApS estrechamente relacionadas: la Red que presenta este inventario y dos más específicas, de universidades (ApS-U) y de ayuntamientos.
Estas redes han desarrollado y publicado a lo largo de los años un bien nutrido conjunto de buenas prácticas de ApS, que demuestran el potencial educativo y social de esta metodología:
- Considera que todas las personas son capaces de mejorar su entorno, desde edades muy tempranas.
- Aglutina diversas instituciones del entorno alrededor de un objetivo y un proyecto comunes: aprender y servir.
- Combina procesos de aprendizaje y de servicio a la comunidad en un único proyecto bien articulado, en el que los participantes aprenden a la vez que trabajan en necesidades reales del entorno con la finalidad de mejorarlo.
- Articula el aprendizaje y el servicio en un único proyecto, en el cual tanto uno como otro han sido seleccionados y planificados de una forma intencional para que se refuercen mutuamente yproduzcan un efecto multiplicador.
- El aprendizaje cooperativo y el aprendizaje por proyectos/problemas están en el núcleo de esta metodología,desde la conciencia de que no cualquier aprendizaje puede ser definido como ApS y no todo servicio comunitario implica un aprendizaje curricular.
- Es un poderoso instrumento para el desarrollo de las competencias o aprendizajes esenciales, contextualizando los aprendizajes y haciendo que adquieran sentido y funcionalidad al solucionar problemas y demandas del entorno natural y social. Se ponen en valor todos los aprendizajes que se pueden movilizar de manera sistemática para desarrollar un servicio a la comunidad.