¿Y si nuestra forma de producir y consumir energía fuese un reflejo de nuestra relación con el planeta? ¿Y si pudiésemos aprender a producir y consumir energía de manera más justa, democrática y sostenible?
La energía desempeña un papel importante en nuestras vidas y sociedades, no hay actividad posible sin energía. Al mismo tiempo, nuestra forma de producir y consumir energía es un reflejo de nuestra relación con el planeta y es que no hay un tipo de energía a la que podamos llamar “neutral”, pues todas tienen características e impactos sociales específicos. Entonces, ¿qué pasaría si aprendiéramos a generar y consumir energía de manera más equitativa, participativa y sostenible?
Para conseguirlo, desde FUHEM un conjunto de situaciones de aprendizaje, desde educación infantil a bachillerato, donde conoceremos la energía más allá de sus características físicas o químicas, entendiendo cómo influye en nuestra vida diaria, pero, por supuesto, también en la sociedad, la economía y el medio ambiente. Todo ello a través de actividades basadas en metodologías activas y que fomentan la construcción colectiva del conocimiento, situando al alumnado en el centro del aprendizaje y vinculando en todo momento los saberes curriculares y ecosociales.
Las situaciones de aprendizaje se estructuran en tres partes principalmente: la concreción curricular, la secuenciación didáctica y el sistema de evaluación.